Aprisco de Casas Nuevas, también llamado la Casilla el Chato.
Barranco de Casas Nuevas
Vereda del Sulayr
Barranco de los Ejarraos
La luna sobre las Calderetas.
Sulayr.
Loma el Garbanzal.
Potentilla Nevadesis.
Tajo el Águila.
El águila sobre volando uno de los tajos, donde cerca tiene su nido.
Hazas del Sabinal.
Cortijo el Sabinal.
La flora abunda en este mes de Junio.
Miguel Ángel haciendo su ruta a caballo y que hoy nos va a guiar a la Meseta el Queso.
Té de la Sierra.
El colorido que nos ofrece en esta época del año los piornos, es una pasada.
Nuestro guía y su perro Manolo, nos espera ya en la Meseta. Tiene mejores pies.
Nos disponemos a dar unas clases a estos jóvenes, de como se hacía el queso.
Barranco y Praos de Beas, borreguiles cubiertos de flores, donde pastan tranquilamente las vacas.
Aquí con mi compañera de fatigas en la Meseta el Queso.
Y... el grupo de pose, para recordar el buen rato que echamos aquí.
Dejamos la Meseta "el Queso" con su quesera picada en piedra, que en tiempos atrás era utilizada por los pastores para hacer el queso.
Seguimos nuestra ruta despidiéndonos aquí de Miguel Ángel, que gustosamente nos ha orientado por sendas hasta llegar a este lugar, veredas que los ganaderos han transitado durante años.
Nos dirigimos hasta la Meseta "el Sabinal", subiendo esta loma para entrar por medio de los dos tajares (foto de abajo).
Picón y Casas Nuevas.
Subiendo a la Meseta "el Sabinal" vemos el cortijo, Sulayr y la meseta. Desde la meseta del Sabinal podemos apreciar: el Picón, Cerro Pelao y Calderetas.
Meseta el Sabinal.
Meseta el Sabinal. Justo encima a la izquierda, el Cerro el Gallo.
El chorrero de la Meseta.
Chorreros y borreguiles donde pastan los animales nos acompañan todo el recorrido. Una vez que hemos cogido altura, seguimos todo recto dirección a las Calderetas.
En esta imagen sobran las palabras. Precioso jardín.
Acequia de los Hornos que nace debajo del ventisquero el Gallo y va a las Hazas del mismo nombre.
Donde se carga la acequia.
Acequia los Hornos.
Las nubes se están volviendo más negras y no es que vayamos muy tranquilas jejje
Calderetas. Borreguiles colmados de flores endémicas de Sierra Nevada.
Entre otras la Estrella de las Nieves, Gentiana Sierrae...
Caballos pastando.
Aunque parezca que estamos en el Cañón del Colorado, nos encontramos en Sierra Nevada.
En Jérez se mantiene viva la práctica ancestral de explotación de los pastos alpinos, vitales para el mantenimiento de los ecosistemas de alta montaña.
Nos encontramos con Juanje "el Dimas", buen conocedor de la sierra, quien al hablarnos de cada lugar, nos decía "Mi abuelo me lo enseñaba".
No se si el paraíso existe, pero para los tres... tiene que ser muy parecido a esto.
Pasamos por la Vacas de Ángel Remolino y pastor y pastora hacen el recuento de las vacas.
Después de hacer el recuento de las vacas y ver que no falta ninguna, nos disponemos a comer en un nacimiento. Juanje hace una poza y así se asegura que el agua es limpia y no ha bebido ningún animal.
Comemos rodeados de las vacas y a continuación, Juanje sigue su camino, el mismo que nosotros hemos recorrido, hacia el Sabinal.
Nosotros nos dejamos caer a la loma abajo, dirección a Casas Nuevas donde tenemos el coche.
En el piorno nos repara una nueva sorpresa, el nido con los pajarillos, posiblemente de un escribano montesino.
y con el Cardo termino esta entrada.
Hasta la próximaaaaa... Porque seguiremos en la montaña.
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